Fue uno solo entre los 50 que la increpaban. Los demás gritaban lemas comunes, como “¡vosotros sois los terroristas!” o “¡espanholistas fora da Galiza!”. No es posible averiguar si el joven nacionalista radical gallego que le chilló a María San Gil “¡ojalá te mate ETA!” sabe que, hace más de 13 años, en el restaurante La Cepa de
San Sebastián, ella estaba sentada enfrente del concejal Gregorio Ordóñez cuando el etarra
Txapote le voló la cabeza.
La agresión a la dirigente del PP vasco el pasado día 12 es el último borbotón del magma que forman las organizaciones que apoyan a la ilegalizada Batasuna y su mundo fuera de Euskadi, en Castilla, en Madrid, en Cataluña o en Galicia. Como una de ellas puede considerarse la plataforma AGIR, que se autodefine como “organización estudiantil de la izquierda independentista gallega”, y que ha reivindicado la algarada contra María San Gil en la Universidad de Santiago. Sus activistas portaban carteles con el letrero “No a la ilegalización de las ideas”, en alusión a las recientes acciones de la Justicia contra ANV y el PCTV. AGIR está de alguna forma hermanada con Ikasle Abertzaleak (Estudiantes Patriotas), la rama estudiantil de Batasuna; sobre esa ligazón ha pedido el PP vasco que se investigue. “Los terroristas de Jarrai, Haika y Segi –juventudes aberzales– mantienen contactos y relaciones con grupos radicales de Galicia, entre otros”, ha dicho Carlos García, presidente de Nuevas Generaciones del PP en Euskadi, al poco del alboroto del día 12. Para él no es casual que los incidentes en la universidad vasca se trasladen ahora a los campus gallegos. Miembros de AGIR han mostrado otras veces su cara violenta amenazando a profesores que hablan castellano.
El Movimiento de Liberación Nacional Galego –nombre inspirado en el MLNV– agrupa a jóvenes como los tres que fueron detenidos en diciembre en Portosín (A Coruña) cuando pretendían atentar contra una inmobiliaria con bombonas de campin-gas. Y no falta mucho para que dos miembros de la AMI (Assembleia da Mocidade Independentista) sean juzgados por hacer estallar una bomba casera en una sucursal de Caixa Galicia en julio de 2005. La técnica es la misma que la utilizada en la
kale borroka. En su web, la AMI sintetiza sus presupuestos ideológicos con una simbólica figura: una hoz comunista clavada en un tricornio de la Guardia Civil.
En las autonómicas de 2005, la AMI pidió el voto para el movimiento independentista radical Nos-Unidade Popular. Nótese el paralelismo con Herri Batasuna (Unidad Popular). El día 4 pasado, la
Batasuna gallega se solidarizó con la izquierda aberzale con un comunicado reclamando la libertad de los dirigentes vascos presos.
“¡Gora ETA, fills de puta!” En la última Diada de Cataluña, el 11 de septiembre, un joven independentista gritaba a los representantes del PP: “¡Gora ETA! ¡Fills de puta! ¡Fills de puta! ¡Morts tots, morts tots, fills de puta!”, y les hacía el gesto de cortarles el cuello. Según destapó la agencia de detectives Método 3, el personaje, grabado en vídeo, era Marc Palacios, que concurrió a las elecciones municipales con el número 13 de la lista de ERC en Montmeló (Barcelona). Las simpatías y hermanamientos de grupos juveniles independentistas catalanes con ANV y PCTV son frecuentes. Endavant, que se define como “organización socialista de liberación nacional”, exige la libertad de los batasunos presos en un comunicado emitido el pasado día 9. El Moviment de Alliberament Nacional Catalá agrupa a formaciones como las Juventudes de Esquerra Republicana de Catalunya. El 30 de enero pasado, cuatro de sus miembros irrumpieron en una conferencia del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, en la Universitat Pompeu i Fabra de Barcelona desplegando una pancarta contra la ilegalización de ANV y el PCTV. Al ser expulsados, uno de ellos llamó “feixista” a Bermejo. Dos meses antes, dos militantes de las JERC fueron detenidos como presuntos autores del envío de amenazas de muerte al líder de Ciutadans, Albert Rivera.
La web de estas juventudes independentistas catalanas enlaza con las de organizaciones amigas como Gazte Abertzaleak (Jóvenes Patriotas, del ámbito de Batasuna), el sindicato aberzale LAB o el Sinn Fein, el brazo político del IRA irlandés. Sobirania i Progrés, por su parte, estrecha lazos con la izquierda aberzale en un cartel en el que la señera estelada y la ikurriña ondean sobre el eslogan “Catalunya i Euskal Herria independència!”.
Con un historial más violento, los Maulets, organización juvenil independentista, tienen, pese a su mayor veteranía, a Jarrai como espejo –han pedido también la libertad de los batasunos–, y reclaman como su campo de batalla un área desde Salses, en el Rosellón francés, hasta Guardamar (
Alicante), y desde Fraga (Huesca) hasta Mahón, en
Menorca. O sea, los Països Catalans.
La España interior “Exigimos el reconocimiento y amnistía de tod@s l@s pres@s polític@s y el fin de la dispersión como método de tortura”, dice el programa de Izquierda Castellana, IzCa, que aspira a la plena soberanía de Castilla, que para ellos forman 17 provincias repartidas por Cantabria, La Rioja, Madrid y las dos Castillas, “los fragmentos en que dividieron nuestra tierra”. La sintonía de IzCa con Batasuna es notable, y el origen de esa similitud es la abogada laboralista Doris Benegas, hermana del socialista vasco Txiki Benegas e histórica protagonista de luchas obreras de la transición cuando, con 21 años, se instaló en Valladolid. Doris Benegas puso en marcha Unidad Popular Castellana en los 80, y las Juventudes Castellanas Revolucionarias (hoy Yesca). Ambos movimientos formaron en el 2000 IzCa, presente en Madrid y en Castilla y León, y con lazos en Andalucía con el grupo andalucista radical juvenil Jaleo y el Bloque Andaluz de Izquierdas.
Hay numerosas pruebas de la relación de IzCa con el radicalismo nacionalista vasco. El 27 de noviembre de 2004, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, IzCa convocó una conferencia cuya cabeza de cartel fueron los entonces diputados de Sozialista Abertzaleak Joseba Permach y Ione Gorizelaia. Cuando el Círculo se dio cuenta de que iban a asistir “personas pertenecientes a una asociación declarada ilegal” –fue la respuesta oficial de la entidad–, canceló el acto. Éste se celebró días después en una sala del Club de Amigos de la Unesco en Madrid. La prensa tuvo problemas. Los fotógrafos de Efe y La Razón fueron amenazados con ser “ahorcados con la ikurriña”, contó el diario madrileño. El 27 de enero de 2007, celebraron un acto similar en el mismo lugar, con el dirigente de Batasuna Karmelo Landa y Doris Benegas, que exigieron la autodeterminación para los vascos y la legalización de Batasuna.
En aquellos tiempos la
salud del etarra Ignacio de Juana Chaos preocupaba mucho a IzCa. Algunos de sus dirigentes se dejaron ver en una manifestación ante el Ministerio de Justicia exhibiendo lemas como “Iñaki libertad”. En su página web, IzCa enlaza con sitios como www.arnaldoaskatu. org. En los documentos de IzCa no hay condena a ETA y sí a las “fuerzas represivas del Estado español”. El pasado 11 de diciembre, su web difundió el informe con el membrete de la ilegal Batasuna “Euskal Herria, un pueblo en marcha”.
El sindicato Confederación Española de Policía alertó en noviembre pasado de la vinculación de Batasuna con la izquierda radical en Madrid y Castilla. Doris Benegas ha delegado en Luis Ocampo, portavoz de IzCa, para contestar a
interviú. “Tenemos contacto y reuniones con la izquierda aberzale y lo seguiremos teniendo en el futuro por la solución del conflicto vasco. Lo que no queremos es seguir así otros 40 años. Mantenemos relaciones con multitud de partidos y formaciones izquierdistas de todo el mundo, desde ERC hasta el Gobierno cubano. Pero hemos llegado a colaborar hasta con alcaldes del PP”. A la pregunta de por qué eluden condenar a ETA. Ocampo responde: “Con mis impuestos financio al Estado. A quien puedo pedirle cuentas es al Estado español, no a ETA, organización a la que no financio”.
La líder de IzCa, Doris Benegas, fue testigo en el juicio contra KAS, Ekin y Xaki el 18 de julio de 2006, y declaró que los encausados “tienen un gran reconocimiento social, son honrados y tienen prestigio”.
La organización ultracastellanista está presente en las campas de Villalar de los Comuneros cada 23 de abril, día de Castilla, y luce su bandera morada acompañada de ikurriñas. En la celebración de 2006, invitaron al grupo musical alavés Mossin Nagant, que canta con entusiasmo al independentismo. Seis años antes, el acto estrella de IzCa fue la quema de una bandera española en un concierto. Una escena más propia de Hernani que de Valladolid.
El epicentro de Izquierda Castellana (IzCa) es Valladolid, pero Madrid es muchas veces su espacio escénico. Y es la Coordinadora Antifascista su vehículo, con el que han movido manifestaciones contra la extrema derecha los 20 de noviembre. El pasado 17 de diciembre, la Coordinadora se manifestó en la Puerta del Sol por el asesinato del joven antisistema Carlos Palomino. En esa manifestación la policía aprehendió un arsenal de navajas, cuchillos, bates de béisbol... Los jóvenes de Jarrai son conocidos y admirados en las
movidas de la Coordinadora, donde se les conoce como “los del norte”.
En la extrema izquierda madrileña abundan grupos pro Batasuna. Es el caso de los Colectivos de Jóvenes Comunistas o la Asamblea Contra la Europa del Capital y la Guerra, que se solidarizan con los presos etarras. Muy virulenta es la formación Comunistas 3, que ha enviado recientemente “un abrazo solidario a todos los compañeros de la izquierda abertzale que está sufriendo en sus carnes el zarpazo de la represión (...) ¡La lucha es el único camino!”.
Para el 23 de febrero, IzCa anuncia su presencia en las Jornadas por la autodeterminación de los pueblos, en el Centro Social La Traba, del barrio de Legazpi.